COMIENZA LA COPA MUNDIAL DE FÚTBOL QATAR 2022
Arranca la Copa mundial en Qatar y los países occidentales critican duramente las violaciones de derechos humanos que supuestamente se viven en este país árabe, empezando por Sepp Blatter quién era presidente de la FIFA cuando se eligió a este país como organizador de la copa.
El Mundial de Qatar 2022 ha estado bajo investigación por distintas organizaciones por hechos de corrupción y violación de derechos humanos. Según numerosos informes, miles de obreros migrantes fallecieron en las obras de construcción de los estadios e infraestructuras por las malas condiciones de trabajo que soportaban.
La elección de Qatar como sede de la Copa del Mundo se dio durante el mandato de Sepp Blatter como presidente de la FIFA, quién a día de hoy es un arrepentido: “Solo puedo repetir: la elección de Qatar fue un error, y yo fui responsable de eso como presidente en ese momento”. “Qatar es un país demasiado pequeño […] y el fútbol y la Copa del Mundo son demasiado grandes para eso”, sentenció Blatter en una entrevista que concedió al periódico suizo Tages-Anzeige
Qatar es un emirato árabe, una monarquía absoluta que posee la tercera mayor reserva de gas mundial y cuya justicia está regulada por la sharía o ley islámica árabe, un código que dicta la conducta, la moral y las normas de culto, entre otros aspectos. Una cultura y unas normas estrictas que no se ajustan a la realidad social de las naciones no árabes, razón por la cual este Estado está siendo objeto de críticas; entre otras cosas destaca la prohibición de prácticas homosexuales bajo penas de hasta siete años de cárcel, un hecho que muchos países occidentales consideran como violación de derechos humanos, y los capitanes de selecciones como la francesa, la alemana, la inglesa y la neerlandesa ya han confirmado que sus capitanes llevarán el brazalete arcoíris en Qatar como muestra de apoyo al colectivo LGTBQ+. El partido Socialista español se ha unido a esta lucha, pidiendo al presidente de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF), Luis Rubiales, que la selección española haga lo mismo luciendo el brazalete arcoíris en el Mundial de Qatar.
Sobre la base de estas tensiones y tan solo 24 horas del partido inaugural (Qatar-Ecuador), Gianni Infantino, presidente de la FIFA ofreció una rueda de prensa para responder a la oleada de críticas recibidas por la celebración del Mundial en Qatar.
Infantino no entiende por qué occidente hace tanto ruido y afirma que las críticas por el Mundial son hipócritas: «Por lo que los europeos hemos hecho durante los últimos 3.000 años, deberíamos estar pidiendo perdón los próximos 3.000 antes de dar lecciones de moral a otros. Estas lecciones de moral son pura hipocresía», afirmaba el presidente de la FIFA.
«Hoy me siento qatarí, hoy me siento árabe, hoy me siento africano, hoy me siento gay, hoy me siento discapacitado, hoy me siento trabajador migrante», así comenzaba el discurso del presidente de la FIFA.
Con esta rueda de prensa la FIFA pretendía suavizar la situación para que no haya problemas durante el evento. «Todo el mundo será bienvenido. Si alguien dice lo contrario, no es la opinión del país ni de la FIFA», explicaba Infantino, que reconoció las garantías de las autoridades locales al respecto.
También estuvo sobre la mesa el tema del alcohol. Concretamente, el de la reciente prohibición de su consumo en los alrededores de los estadios. «Pienso personalmente que se puede sobrevivir tres horas sin beber cerveza, algo que ya ocurre en muchos otros países como Francia, España o Escocia», reconoció.
Después de Infantino, tomó la palabra el jefe de comunicación de la FIFA, Bryan Swanson, para declarar su homosexualidad mediante un argumento en defensa de Infantino, víctima, según él, de «críticas» venidas «en especial de la comunidad LGBTQ+».
«Querría decir algo aprovechando esta plataforma. Yo estoy aquí sentado, en Qatar, en una posición privilegiada, delante del mundo entero, como persona gay», aseguró el escocés, quien garantizó que todos los visitantes, sea cual sea su orientación sexual, serán «bienvenidos».
«Hemos recibido garantías sobre el hecho de que todo el mundo será bienvenido y creo que todo el mundo será bienvenido en esta Copa del Mundo» concluyó Swanson.
